Seguimiento: Como nuevo sistema operativo

     UN BLOG SOBRE EL SEGUIMIENTO


     El target group o objetivo en cuanto a la Fe es la vinculación que tenemos con Jesús. 
     Mediante esa vinculación se genera un compromiso, seguimiento y expectativa mediante un acción dinámica diaria.

     No es un sentimiento de atadura, encorsetamiento o cárcel moral, sino todo lo contrario , es la experimentación de la autentica libertad.
     En cierta forma es un emprendimiento, ya que muchas veces hay que salir de la zona de confort, de la tradición y del estilo de vida habitual.

     Hay en ese seguimiento una regeneración de auténticos valores como la fidelidad, la determinación y la predisposición a realizar una contracultura en el nuevo camino. Es curioso que a los primeros seguidores de Jesús les llamaban los del camino. Una especie de hoja de ruta, al estilo Jacobeo pero por siempre.

    

      La verdadera espiritualidad del seguimiento de Jesús no lleva condiciones enfocándose a una intimidad con el maestro pero también en una expresión social y pública.
     Cuando se genera la autentica liberación del egoísmo  de la propia comodidad y de la autentica inversión en los valores del Reino es cuando se anda en la libertad propuesta por Jesús  La fe tiene que ver con algo más que una serie de ideas sino también con una experiencia común y compartida. 

    Seguir a Jesús no es: huir del mundo al estilo gnóstico sino comprometerse con los intereses de los más necesitados o que andan en injusticia social. Se sigue a Jesús cuando se deja aparte o se relativiza el sistema económico, el sistema social y el sistema de dependencias autoritarias de la sociedad. Se sigue a Jesús con el sistema operativo propuesto por los valores de su palabra.

     Es un esfuerzo constante, una especie de auto regeneración de esfuerzo, porque cuando dejamos de intentarlo dejamos de seguirle, por ello no es mejor quien lo teoriza solamente sino quien lo intenta diariamente.

SIN DIOS NO HUBO MILAGRO.

   
WITHOUT GOD THERE WAS NO MIRACLE.



     El otro día pasaba por delante de una librería que afuera tenía los diarios deportivos, a veces no lo puedo evitar y intento leer los titulares principales, y me llamó la atención uno de ellos que decía lo siguiente  "SIN DIOS NO HUBO MILAGRO".

     Me hace mucha gracia esas pequeñas licencias que a veces se toman los periodistas a la hora de escribir utilizando expresiones de la Biblia o del cristianismo popular o como prefieran llamarlo.

    Eran las semifinales de la CHAMPIONS y se habían puesto algunas expectativas en que el equipo de fútbol de casa reaccionase y pudiese hacer la remontada, evidentemente como su estrella o jugador principal no pudo participar por temas de lesión dificultó más la remontada que a la larga supuso una derrota considerable.

     Evidentemente Si Dios no está no hay milagros, pero aquí y en todas partes, ya que El y nada más que El tiene la potestad de cambiar las cosas  y  puede hacer cambiar el curso de la historia como por ejemplo :

   " los Ingleses decían que el viento que derribó a la armada invencible (la armada más grande de la historia) seguramente era protestante o Dios había estado detrás.  Recordemos que en el siglo XIX Inglaterra fue uno de los países con más vocación misionera de Europa y del mundo y eso no sabemos si hubiera podido ser con la llegada de Felipe II  a Inglaterra  ni tampoco  todos los desencadenantes que hubiesen pasado"

     Jugar con la Ironía es una de las características de un gran titular, evidentemente ni ese gran jugador es Dios ni era necesario ese milagro. Pero muchas veces esos titulares nos hablan y recuerdan que hay un ligero trasfondo cristiano que habla de Dios porque "El que tiene retiene" 

    Y aunque si no se pusiera nada  de esta singularidad también hablarían los periódicos  ya que recordemos que nuestro calendario nos regimos por el anno domini, y cada vez que hay una fecha y un año estamos recordando un gran evento que ocurrió hace más de dos mil años que cambió el giro de la historia y de los acontecimientos e incluso la forma de medir nuestro calendario

El equilibrista cristiano (1)

   
     Hay una cierta corriente de pensamiento que está en nuestros sectores, donde rechaza lo que es la religión organizada y abraza la espiritualidad.  Pero hablar de espiritualidad muchas veces es meterte en un campo muy subjetivo, ya que la verdadera espiritualidad en el creyente con todas sus experiencias tiene que comprobarse con verdades bíblicas.

     Una aplicación desequilibrada de las doctrinas relacionadas con la espiritualidad bíblica dará como resultado una vida cristiana desequilibrada, demasiado énfasis en lo místico puede obscurecer la practica de la vida espiritual, mientras que todo lo contrario puede motivar una falta de visión.

     
     La verdadera espiritualidad requiere de tres factores innegociables : La regeneración, el Espíritu Santo y el tiempo. Por ello es necesario pues examinar algunos rasgos de la naturaleza del hombre que inciden en la espiritualidad, la verdad sobre la caída de hombre, que el hombre es pecador y entrando en el interior de l hombre su polifacética actitud ante esta cuestión.

    
     También tenemos que tener en cuenta las dos capacidades interiores de nuestro ser, la capacidad de servir al pecado y la de deleitarse en la ley de Dios, y por consiguiente la constante lucha de las dos naturalezas véase Duelo de titanes en el km O

CIERTAS RESPONSABILIDADES PERSONALES

     La palabra santificar significa básicamente poner aparte, en el cristiano. Hay unos aspectos, el primero es la santificación posicional, el segundo es la experiencia contraste y constante o trabajo progresivo de continuar aparte durante toda nuestro caminar diario.
     Las escrituras nos enseñan que todas las personas de la Divinidad, tienen un ministerio a este respecto, la obra del Espíritu Santo quien nos transforma de gloria en gloria en la misma imagen.
     Dios llama, apela, a sus hijos para que dediquen sus vidas sobre la base de que El nos ha bendecido primeramente,  y Jesucristo su labor de intercesión constante a favor nuestro.
     La dedicación se refiere a los años de la vida ya que el único periodo en que funciona el cuerpo, la dedicación requiere una separación en el tiempo malo en que vivimos, el cuadro que presenta las escrituras en el de un acto inicial de dedicación que , incluye todo el ser para toda la vida.
    Los dones, un don espiritual es primeramente una habilidad concedida a la persona, no es un lugar de servicio, es la habilidad ejercida, por ejemplo el Pastor.
    Algunos dones espirituales son: pastoreo, enseñanza. fe  exhortación, discernimiento de espíritus, dádivas  apostolado, profecía, milagros y lenguas.
    Es también mayormente en los asuntos rutinarios de la vida donde se requiere la fidelidad, tanto en los problemas como en la oración y en las buenas obras.

ALGUNOS PROBLEMAS PRACTICOS

    El ser lleno del Espíritu es un mandato para el cristiano, las confusiones entre el bautismo y el ser llenos del espíritu Santo conduce a formulas equivocadas. El cristiano se desarrolla con éxito solo cuando depende del gobierno de su vida efectuado por el Espíritu santo. Las características de una vida del Espíritu son: semejanza a cristo, vida de servicio, alabanza, adoración, y acción de gracias y sumisión.
   Desde el momento de su primer pecado hasta su derrota final el plan y propósito de Satanás ha sido establecer un reino rival de Dios.
   Entre sus artimañas podemos encontrar : oposiciones abiertas, teología sistemática que apela al orgullo intelectual, presiones sobre el creyente, desorganizamiento, etc.
   La armadura construida contra las asechanzas del diablo, el rasgo final es la oración, como guía del E.S.
   La tentación es común al hombre, el creyente no tiene que ceder a ella, justo que Dios, es misericordioso y ha preparado vías de escape, para poder soportarlo.
   Por ultimo, debemos definir el legalismo " como una actitud carnal que se conforma con el objeto de exaltarse a si mismo. El llegar a la meta de la vida cristiana es un proceso continuó que dura toda la vida, la meta es ser semejante a Cristo.